Reflexiones de fin de año.

No puedes guiar el viento, pero puedes cambiar la dirección de tus velas.

Cuando comencé este blog, allá por el mes de mayo, uno de los objetivos que me propuse fue el de conseguir cinco mil visitas cuando terminase el año y habiendo superado esa barrera, me doy cuenta que, como casi todo en la vida, lo mas importante no es la cantidad, sino la calidad. Y cuando hablo de calidad me estoy refiriendo a todos aquellos seguidores, algunos tan cercanos como Fran6Q y otros tan lejanos como Vicky desde Israel o Humberto Silva desde Brasil, que con sus comentarios han alimentado mi amor propio, dándome fuerza para seguir publicando. Así mismo me llena de orgullo saber que existen una serie de seguidores anónimos que espero que hayan visto en este blog algo diferente a los demás. Este fue otro de mis objetivos, el plasmar la diferencia que existe en lo que algunos hacemos en bonsái por estas tierras, no solo en cuanto a las especies, sino en las formas. Para ratificar lo de las diferencias les pongo un par de fotos de algunas de mis Bougainvilleas que a 31 de diciembre están floreciendo, cuando en otros blogs nos muestran unas bucólicas fotos de bonsáis llenos de nieve.

Cuando hablo de diferencias, hablo del conjunto de pequeños detalles como estos.

Permítanme que incluya en esta pequeña reflexión una petición y es que el año entrante se solucionen los problemas mas importantes de este mundo y que el bonsái se siga globalizando para llevar a cada rincón del planeta la nobleza que tiene este arte.
Por mi parte espero tener ánimos para seguir publicando y así poder difundir el bonsái, que es el fin último de este blog.
Ya no me queda sino felicitar a todos por la entrada en el nuevo año o como dice un amigo ¡¡¡Leña al 2010!!!

P.D.: He colocado un enlace debajo de mi lista de blogs en el que pinchando accedes al foro de Portal Bonsái donde Jose Acuña (Centro Bonsái Tenerife) va a contar sus vivencias, con fotos incluidas, en Taisho-en, en Japón.