Si te cansas de un amigo, préstale
dinero.
Este pasado fin de semana me metí
en faena y siguiendo la técnica aprendida del amigo Juan Tomas, me dispuse a
realizar mis primeras Kuramas. Estoy bastante contento con el resultado, pues
para ser la primera vez, han quedado tal y como las había preconcebido. El
color y la textura asemejan al barro, no pareciendo que estén realizadas con
papel y mortero.
Lo mejor es que puedo
realizarlas del tamaño y forma que necesite en cada momento. Están muy bien
para plantas de acento, e incluso, para arbolitos de pequeño tamaño. Tengo que
seguir experimentando con otros colores. Les prometo poner los resultados, como
siempre.