Hay dos grandes días en la
vida de una persona: el día que nace y el día que descubre para qué.
La hornada de noviembre está
dividida en dos partes, publicando hoy la primera de esas partes formada por cuatro
macetas y que pongo a continuación con sus características.
La primera es redonda sin
patas, con el borde superior irregular y ligeramente hacia adentro. Está
esmaltada en craquelado claro con reflejos que chorrean en verde oliva, ocre y turquesa.
Mide 8 cm. de diámetro, 5,5 cm. de boca y 5 cm. de alto.
La segunda es cuadrada, alta,
algo irregular y con patas. Está esmaltada en brillante en un color que puede
ser camel o color piel (es como un rosado moteado). Mide 5 cm. de lado y 7 cm. de
alto.
La tercera es redonda con tres patas, con borde superior irregular y elaborada con barro color chocolate. Su borde superior está esmaltado en blanco mate con reflejos de marrón rojizo y artemisa; este esmalte cae de forma irregular con una textura como de espuma. Mide 12,5 cm. de diámetro exterior y 4,5 cm. de alto.
Por sus dimensiones se puede usar para kusamono o para shohin, estando preparada con agujeros para poder atar el pequeño árbol.
Y la cuarta es una maceta
para bonsái rectangular con paredes inclinadas y un pequeño arco en la parte
inferior de cada una de sus caras con el fin de que apoye en sus vértices a
modo de patas. Está esmaltada en craquelado con reflejos de verde oscuro (casi
negro), ocre y artemisa. Mide 21 cm. de
largo, 16 cm. de ancho y 4,5 cm. de alto.
En la siguiente fotografía
podemos apreciar un detalle de sus colores con el craquelado.
Pues que claro lo tengo, me quedo con la maceta para bonsái, ese craquelado le da un toque... ques que se...!!! :-)
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Fran. Claro que si; están todas muy bonitas, especialmente el craquelado de la de bonsái.
EliminarUn abrazo.
Los craquelados son una pasada, te he mandado mail. Me encanta la primera, pero la tercera y la cuarta me han hecho dudar.
ResponderEliminarUn abrazo
Es normal que dudes, Loli. Con estos resultados estoy bastante contento.
EliminarUn abrazo.
¿Qué podemos decir de las macetas? Cada vez mejor Martín, los craquelados y las formas son fantásticas. Enhorabuena.
ResponderEliminarUn abrazo. César.
Gracias Cesar. Siempre intento superarme con las formas y con los esmaltes, aunque llegará un momento que las cosas se repetirán (o así pienso yo).
EliminarUn abrazo.
Preciosas Martín.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Carlos.
EliminarUn abrazo.
Cada día te superas Martín, la verdad es que antes de ver la entrada me dije: " a ver que maceta me gusta más". Ahora, la verdad, tengo mis dudas. Me gustan todas, pero sobre todo la primera y la tercera.
ResponderEliminarUn abrazo.
El proceso es muy creativo, tanto para las formas como para los esmaltes; si los resultados son buenos y a ustedes les gusta lo que hago, mejor que mejor.
EliminarUn abrazo.
Te estas convirtiendo en un maestro del craquelado. Me encantan la primera y la última.
ResponderEliminarUn abrazo.
Se pasa bien experimentando con los esmaltes y esperando los resultados del horno (de eso tu sabes mucho) Me alegra especialmente que te gusten, Ángel.
EliminarUn abrazo.
Como dice Ángel, precioso craquelado. Me gusta menos la segunda en este caso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por lo que veo a nadie le ha gustado esa segunda y en la mano es muy bonita, tanto por la forma como por el esmalte, pero como sobre gustos no hay nada escrito...
EliminarCierto es que compite con los craquelados, que han salido muy bien.
Un abrazo.